miércoles, 26 de febrero de 2014

Vélez no tuvo problemas ante Paranaense y manda en su grupo

En duelo de líderes del grupo 1 de la Copa Libertadores, Vélez derrotó por 2 a 0 en el José Amalfitani a Atlético Paranaense de Brasil, en la segunda presentación de ambos equipos en el certamen. Con este triunfo, el conjunto de Liniers suma seis puntos, tres goles a favor y ninguno en contra y quedó muy bien posicionado, pensando en la clasificación a los octavos de final.


Después de su victoria 1 a 0 frente a Universitario, en Lima, el equipo de José Flores se encontraba con una vara a priori más elevada. Los brasileños, que habían vencido por 1 a 0 a The Strongest como local, aparecían como los favoritos para pelearle al Fortín el primer puesto de la zona.
En el primer tiempo, no le fue sencillo al local desatar el nudo de Paranaense, un equipo bien abroquelado en el fondo, dinámico, no demasiado audaz en su búsqueda, pero bien parado para salir de contra.






Ante esa sólida estructura, Vélez fue el dueño de la pelota y la iniciativa, aunque le costó mucho inquietar al arquero Weverton. Agustín Allione y Lucas Romero no generaron desequilibrio y Lucas Pratto se sacrificó, tirándose atrás para sumarse a la gestación, pero tampoco aportó soluciones.
Ante ese panorama, la llave parecía estar en una pelota parada. Y así fue. A los 37 minutos, Fernando Tobio ganó de arriba tras un córner de Héctor Canteros, un rebote en Sueliton dejó la pelota servida en el área chica y el defensor, cayéndose, alcanzó a empalmarla de derecha para que los de Liniers se fueran al descanso con la tranquilidad del 1 a 0.


El desafío era complicado para la visita, un equipo armado para defender el cero en su arco que se enfrentaba a la obligación de salir a buscar. Antes del primer minuto de juego del complemento, dio un aviso, con un centro de Natanael y un anticipo en el área de Ederson que controló Sebastián Sosa.
Sin ser un derroche de virtudes, Atlético Paranaense fue metiendo a Vélez en su campo y comenzó a merodear seguido el área de Sosa. Al equipo del Flores le costaba recuperar la pelota y, cuando lo hacía, la perdía demasiado rápido.


Así, el Fortín debió convivir con la incertidumbre del resultado hasta que pudo elaborar una combinación punzante, que fue definitiva para el encuentro. A los 33 Romero recuperó en una floja salida de la defensa, la punteó para Allione, fue a buscar por la derecha, recibió la devolución y metió una diagonal certera para Pratto, que anticipó en el primer palo y le puso el moño a la faena, que no fue brillante pero dejó a Vélez en la cima del grupo.

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